Mis experiencias en México

Por Alexandra Behns
Español Intermedio I

Primero, es decir que la vida en México es completamente diferente que la vida en Alemania.
Una de las razones por la que gente es diferente. En Alemania, la gente es más fría. Todo es muy bien organizado, pero también muy estricto. Aquí en México, me gusta que la gente es más abierta, y más relajada. Claro que eso también puede causar problemas. Si vienes de un país como Alemania, donde el tiempo es una cosa muy importante y donde la gente viene cinco minutos antes a una cita, te parece un poco raro cuando la gente viene treinta o más minutos más tarde de lo acordado.

Otra cosa es el clima. En Monterrey, el clima me encanta. Siempre hace calor, casi todos los días hace sol y la vida está fuera de la casa. Ir de compras, ir a fiestas, juntarse con amigos, todo se pasa mejor si no tienes que lleva chamarras y bufandas.

La Universidad TEC de Monterrey me gusta mucho. Es una institución muy buena, muy moderna y muy grande. En el momento TEC tiene 17000 estudiantes. Mi universidad en Alemania tiene 150 estudiantes en total, y solamente tres carreras. Ambas tienen cosas buenas y cosas malas. Lo que me gusta en la IU en Alemania (International University in Germany) es que tú conoces a todos. Vivimos juntos en el campus y somos como una gran familia. La mitad de los estudiantes viene de otros países, los profesores también y tenemos muchas cosas para aprender de los demás. Aquí, es más anónimo porque no puedes conocer a 16999 personas. Pero que las clases aquí son pequeñas también, me gusta.

También, aquí hay más selección. Por ejemplo en Alemania tenemos clubes deportivos pero son muy pequeños, necesitas bastantes personas para que un club exista y no tenemos técnicos, debemos practicar solamente con otros estudiantes pero no nos ayuda nadie. Aquí juego al tenis y bailo Salsa. Hay muchas más posibilidades y muchos son sin costo. Además, hay muchas actividades como el Cine Latinoamericano o presentaciones. Por eso, puedo imaginarme estudiar la maestría en una Universidad como TEC.

La comida es otra cosa que es muy diferente. En Alemania comemos mucho pan, muchas legumbres, lechuga, patatas y pasta. Aquí, la comida más común son los tacos. Puedes comprarlos en cada calle como el pan en Alemania. Desgraciadamente me parece que hay un poco menos variedad. Tacos, frijoles, papas y hamburguesas son las cosas más comunes aquí y a veces es difícil encontrar otra cosa. Afortunadamente, la comida –como todo- es más barato en Monterrey.

Al contrario, aquí hay mucha más variedad en bebidas. En Alemania tomamos mucha agua mineral y mezclamos esa agua con jugos. Hay muchas cervezas y refrescos como coca. Pero aquí hay mucho más. Hay más marcas que producen refrescos (como Joya o Squirt), hay aguas de tipos diferentes, té helado y mucho más. Por eso, cada día compraba otra bebida en el Oxxo y siempre estaba curiosa por descubrir nuevos sabores.

La cosa que a veces me vuelve loca aquí es que la gente hace todo con mucha lentitud. El tiempo no importa, esperar es habitual y en las oficinas la gente ve televisión. Eso, en Alemania no funcionaría. Somos más eficientes y no nos gusta perder tiempo.

Tampoco comprendo la cosa de los aire condicionados. El clima aquí es perfecto. Los ACs están superbien, pero no se necesita bajar la temperatura tanto, que la gente tiene frío. Eso solamente quema energía y dinero que podría ser invertido en cosas más importantes como educación y alimentación para los pobres que viven en las calles. Además, las diferencias tan grandes entre temperaturas dentro y afuera son muy malas para el cuerpo y la salud.

En México, siempre hay ruido. A veces me pregunto cómo la gente puede diferenciar el ruido normal con alarmas reales.

México no tiene organización como Alemania, pero no obstante, todo funciona. Eso en mis ojos es típico para los mexicanos. Son tan relajados, los estudiantes hacen todo en el último momento, las administraciones en empresas son muy complicadas, pero al final, todo está bien.

Otra cosa que me gusta es que para los mexicanos, la familia es muy importante. Desgraciadamente, me parece que lo más desarrollado un país, lo menos importante las relaciones personales. En México, los jóvenes obedecen a sus padres (normalmente) y tienen mucho respeto. Asimismo, la iglesia en México importa más. Más gente es religiosa, cada lugar, hasta en las tiendas de tacos tienen un estante con una figura de la virgen de Guadalupe. Paradójicamente, en Alemania, donde muchas menos personas son religiosas, todas las tiendas deben estar cerradas el domingo, mientras que en México, están abiertas. A veces, unas cosas se ve en aspectos diferentes.

La última vez que yo me di cuenta de que las cosas son tratadas diferentemente en los dos países fue cuando la influenza fue conocida, hubo mucho más artículos en los periódicos en Alemania que en México. No podía creer, que algunas personas en México no creían que la crisis era real y les dije, que si está en los noticiarios en Alemania, tú puedes creerlo porque en Alemania no hay tanta corrupción. Al final, me decidí regresar a Alemania temprano. Ahorita, yo se que igualmente me podría haber quedado en mayo en Monterrey y estoy un poco triste que me faltó el mes. Los números de las personas infectadas fueron corregidas abajo y todo se destensa en México. Algunas personas hasta dicen que solamente hubo una exageración de la crisis por el gobierno mexicano para desconcentrar la atención de la legalización de algunas drogas. Eso es muy triste. Yo sabía que podría ser que todo se destensa pero tenía miedo que no podía salir del país y dado que mi graduación en Alemania es agosto 1 y todavía tengo que escribir mi tesis, elegí el camino más seguro. Ahorita, en Alemania tengo que reír cuando la gente extiende el pánico y tiene miedo porque en México, donde todo fue mucho más grave, nadie realmente tenía miedo. Uno de mis amigos de Alemania se quedó en Monterrey y yo lo comprendo bien. Pero ahora que las clases se reanudaron, no podría viajar y en Alemania tengo tantas cosas que organizar que es bueno que vine temprano porque tengo más tiempo. Extraño México muchísimo y no puedo esperar a regresar. A más tardar regreso en junio 2011 porque entonces será la boda de mi compañera de departamento.